Protege de resbalones y caídas a tu unidad al completo, desde los soldados en formación hasta los oficiales, con nuestras duraderas y cómodas botas militares de seguridad antideslizantes SFC.
El 47,75 % de los accidentes se producen durante la instrucción deportiva
Los militares están sometidos a sesiones intensivas de entrenamiento...
Protege de resbalones y caídas a tu unidad al completo, desde los soldados en formación hasta los oficiales, con nuestras duraderas y cómodas botas militares de seguridad antideslizantes SFC.
El 47,75 % de los accidentes se producen durante la instrucción deportiva
Los militares están sometidos a sesiones intensivas de entrenamiento, a situaciones altamente estresantes y a un entorno en el que es habitual que se sucedan días agotadores y largas noches de servicio. Las lesiones más comunes entre los militares son los golpes, los aplastamientos y las torceduras, y casi la mitad de ellas se producen en las sesiones de instrucción, especialmente durante la carrera. Otros de los daños más habituales están provocados por caídas en altura o al mismo nivel.
Según la Estadística de Accidentes en las Fuerzas Armadas del año 2021, el porcentaje de accidentes de carácter militar aumentó en 2021 frente a 2020, aunque fue claramente inferior al registrado durante 2019, año en el que las estadísticas no se vieron afectadas por los efectos de la pandemia de la COVID-19. Un 47,75 % de estas lesiones tuvieron lugar durante la instrucción deportiva, donde destacan las producidas en carrera (38,27 %), durante la práctica gimnástica (24,96 %) o en las pruebas físicas oficiales individuales (9,87 %)
El ejército realiza una instrucción y un entrenamiento deportivo de alto nivel porque, cuanto más realista es la formación, más se asemeja a una operación militar real. De este modo, se adquiere experiencia en la toma de decisiones en condiciones de riesgo para ser capaz, posteriormente, de aplicar las habilidades adquiridas a situaciones reales sin poner vidas en peligro.
Son muchos los riesgos a los que se exponen los militares en el día a día. Los más habituales son:
- Resbalones, tropezones y caídas
- Lesiones musculoesqueléticas que conllevan dolores en la zona lumbar, el cuello y los hombros
Independientemente de si las lesiones son de mayor o menor gravedad, prevenir y evitar los riesgos tanto dentro como en los alrededores de las bases militares contribuye a crear un entorno de trabajo seguro.
Existe una gran variedad de razones por las que el personal militar puede sufrir accidentes laborales. Entre ellas se incluyen:
- Daños durante las sesiones de entrenamiento
- Heridas en el frente
- Caídas en altura y lesiones por aplastamiento
- Accidentes provocados por maquinaria o equipamiento
- Trabajar en ambientes y circunstancias en constante cambio y en terreno irregular
- No cumplir los procedimientos y protocolos de seguridad
Los jefes de unidad de las Fuerzas Armadas pueden implementar medidas para reducir el riesgo de lesiones en los pies en la tropa:
- En primer lugar, pueden reducir el tiempo que los soldados pasan corriendo, entrenando o lanzándose en paracaídas y poner en práctica ejercicios que fortalezcan la capacidad física.
- Además, pueden proporcionarles botas militares de seguridad adecuadas que sean cómodas y resistentes y que aporten estabilidad a los pies para evitar tropiezos, caídas y problemas de espalda.
Finalmente, promover el uso adecuado de los procesos y el equipo de seguridad puede reducir algunos riesgos y crear un entorno de trabajo más seguro.