Para que un comercio funcione adecuadamente, debe contar con diferentes perfiles que desempeñen sus tareas de forma eficiente. Los supermercados necesitan una amplia variedad de profesionales para cubrir todas sus necesidades tanto de organización interna como de atención al cliente. En ocasiones, especialmente en pequeños establecimientos, el personal lleva a cabo funciones asociadas a diferentes puestos, por lo que es habitual que no se tengan claras las tareas que corresponden a cada cargo.
El puesto de cajera es el más conocido por los consumidores, ya que trabajan eminentemente de cara al público. Estas profesionales tienen unas funciones muy concretas y, por lo tanto, deben contar tanto con unas habilidades específicas para llevarlas a cabo con éxito como con los elementos de seguridad para no poner su salud en riesgo. En Shoes For Crews queremos ayudarte a definir estas funciones y a tener claras las diferencias con otros puestos similares para que encuentres la persona que mejor se adapte al puesto.
Definición del puesto de cajera de supermercado
Como bien sabes, uno de los puestos más relevantes en un supermercado es el de cajera, ya que no solo trabajan de cara al público atendiendo las necesidades del cliente, también organizan los productos en la tienda, efectúan el cobro de los artículos y realizan la gestión de caja.
Funciones de las cajeras de supermercado
Las cajeras deben ser polivalentes y cumplir con eficacia tareas muy diferentes entre sí, por lo que encontrar a las personas adecuadas es todo un reto para los supermercados que, para evitar la fuga de talento, tienen que prestar especial atención a sus necesidades y proveerlas de las prendas necesarias para que desempeñen sus tareas con seguridad.
Cobro y gestión de caja
La principal función de las cajeras es el cobro de los artículos, un cometido que va más allá de pasarlos por el escáner y solicitar el importe final. Este personal debe contar con formación para recoger y dejar registro del dinero en efectivo, con tarjeta de crédito o a través del móvil.
Además de gestionar los pagos y guardar el dinero en la caja, es necesario que hagan el cierre diario asegurándose de que los importes cuadran. Una vez realizadas las verificaciones, deben llevar a cabo las tareas administrativas y trasladar el efectivo a un lugar seguro designado por el supermercado.
Información a los usuarios
Otra tarea fundamental para las cajeras es informar a los clientes que tienen dudas sobre productos o la ubicación de los artículos en la tienda. Para hacerlo con eficiencia, tienen que conocer a fondo el género disponible en el establecimiento, sus características y dónde están colocados.
Apoyar a los reponedores
Las cajeras trabajan codo con codo con los reponedores, ya que son su apoyo para colocar los artículos en las estanterías, poner los carteles con los precios y las ofertas correspondientes y mantener la tienda ordenada.
Además, reciben los pedidos y comprueban que no haya desperfectos ni productos cerca de la fecha de caducidad. También son las encargadas de informar a los reponedores cuando hay falta de existencias en los expositores para que llenen las estanterías con mercancía del almacén.